Semillas regulares o variedades feminizadas: ¿cuál es mejor? A la hora de elegir las mejores semillas de cannabis para tu siguiente cultivo, decidir si se trata de semillas de marihuana feminizadas o regulares (no feminizadas) es un asunto importante. Las semillas feminizadas tienen sus ventajas, pero también las no feminizadas. Entonces, ¿cómo saber qué es lo mejor para tu caso particular? Nuestro experto en cultivo, Nibameca, comparte su visión y experiencia personal para explicar los beneficios de las semillas de cannabis regulares.
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Nibameca
¿Buscas experiencia de cultivo real y de primera mano, alguien que se remanga las mangas y lleva las botas llenas de barro? Encontrarás mucho de esto en nuestros blogs y guías de cultivo de Nibameca. Desde que descubrió nuestra genética White Choco, este cannaboss se niega a abandonar nuestro programa de cultivo AG, y con razón. Este veterano cultivador es todo calidad, innovación y sostenibilidad en los proyectos de cultivo de interior. Nuestro gurú de cultivo personal de Amsterdam Genetics comparte su experiencia contigo para que saques el máximo partido a cada semilla de hierba que plantes. Más sobre Nibameca
Semillas feminizadas o regulares: Una distinción importante
En primer lugar, semillas regulares; empecemos por lo básico. Como ocurre con muchas especies, el cannabis también está sujeto a la historia de las flores y las abejas. Bueno, en realidad, podemos omitir las abejas, porque el cannabis se reproduce por polinización directa de una planta hembra por otra macho, sin depender de los insectos polinizadores. Los machos producen polen; las hembras lo utilizan para producir semillas que engendran la siguiente generación. El cannabis es lo que llamamos una planta dioica, es decir, que los dos sexos se reproducen juntos. Así es como se ha hecho desde siempre, pero si lo que quieres es cultivar hierba, en realidad solo necesitarás plantas femeninas para conseguirlo. Esto se debe a que las hembras son las únicas de las que brotan esos preciosos cogollos florales que tanto gustan a los humanos. Casi se podría pensar que los machos no sirven para nada. Pues bien, mis queridos cultivadores masculinos, solo tenéis que preguntar a vuestra novia o esposa: probablemente os dirá que es totalmente cierto.
Y, sin embargo, las plantas de cannabis macho son absolutamente cruciales. Sin machos, no habría polen; y sin polen, no habría una nueva generación para la temporada del año siguiente. Sin embargo, cultivar cinco plantas femeninas en presencia de un solo espécimen masculino puede provocar que todas tus chicas produzcan semillas. Eso significa que puedes despedirte de tu cosecha, porque los cogollos no crecerán bajo ningún concepto, y además tendrán menos tricomas. Malas noticias para ti. Básicamente, los cultivadores (así como los fumadores) quieren que sus cogollos florales femeninos sean “sinsemilla”. Una vez que sabes eso, empiezas a preguntarte por qué alguien querría comprar semillas regulares. A diferencia de las semillas feminizadas, las semillas regulares de cannabis incluyen de media el 50% de ejemplares masculinos. Nadie quiere eso en su jardín o tienda de cultivo, ¿verdad?
¿Por qué cultivar semillas regulares?
Seguramente te lo esperabas: no es así. Las plantas macho tienen su utilidad, incluso para ti como cultivador. Esto va más allá de sus medios naturales de reproducción. Las plantas macho te dan la oportunidad de crear tus propios cruces, lo cual resulta muy interesante para los aficionados a la experimentación. ¡Ojo!, las semillas normales no se convierten en plantas macho por defecto. Naturalmente, la mitad de ellas se convierten en hembras, al igual que pasa con los bebés humanos; solo que no se sabe de antemano. Genéticamente, las semillas regulares no feminizadas son ligeramente diferentes de sus homólogas feminizadas. Esto puede ser una ventaja en las circunstancias adecuadas. Las semillas regulares son menos propensas a convertirse en hermafroditas cuando se estresan, por ejemplo. Más adelante te hablaré de las ventajas. Pero primero, volvemos a las semillas de cannabis feminizadas: ¿cuál es la gran diferencia?
Semillas de marihuana feminizadas: Puro poder femenino
Las semillas de cannabis feminizadas son fáciles de cultivar y pueden utilizarse en casi cualquier tipo y tamaño de cultivo. Además, están destinadas a producir hermosas plantas femeninas, con mínimas posibilidades de que una se convierta en un espécimen masculino. Los entendidos afirman que las plantas cultivadas a partir de semillas regulares son más fuertes y robustas, pero eso es casi imposible de comprobar. No obstante, hay razones para cultivar semillas normales y elegir los especímenes masculinos.
De hecho, así era como lo hacía todo el mundo hace unos veinte años, y seamos sinceros: no es para nada ciencia espacial.
Cómo diferenciar las semillas feminizadas de las normales
Permíteme que te explique cómo distinguir las diferencias. Créeme: es muy sencillo.
Plantas hembra:
Las plantas hembra se identifican por los cálices en forma de lágrima que salen de las axilas de la planta y de los que brotan dos pelos blancos.
Plantas macho:
Las plantas de marihuana macho muestran por primera vez su sexo en los nudos. El cannabis macho desarrollará pequeñas bolas del tamaño aproximado de una semilla de cannabis desde sus nodos.
Más información sobre cómo detectar el cannabis macho o hembra
El momento perfecto: ¿Cuándo puedes distinguir las plantas de cannabis macho de las hembras?
Así que ya lo sabes: distinguir los machos de las hembras es así de sencillo. Lo único que hay que tener en cuenta es el momento. Deshazte de los machos en cuanto veas que surgen sus características sexuales. Suena duro, y de hecho lo es; pero realmente quieres actuar antes de dar una oportunidad a la polinización. Una vez que esto ocurre, no hay vuelta atrás. Las características sexuales masculinas y femeninas se hacen evidentes cuando la etapa vegetativa del ciclo de vida del cannabis termina, dando paso a la etapa de floración. El momento exacto varía según las variedades, pero suelen empezar a aparecer entre cuatro y seis semanas después de la fase de crecimiento. ¿Has cambiado ya tu iluminación a 12/12? Será mejor que estés atento.
¿Una nueva era? El auge de las semillas feminizadas
Las semillas feminizadas causaron un gran revuelo cuando salieron al mercado. De hecho, se convirtieron en una auténtica moda. Esto se debió a que las semillas feminizadas facilitan mucho el trabajo del cultivador, ya que las semillas feminizadas eliminan la necesidad de seleccionar solo plantas femeninas para llenar tu cuarto de cultivo. Además, la genética feminizada suprime la necesidad de cultivar plantas adicionales, ya que todas las semillas producen ejemplares femeninos, y eso significa María.
Poco después de su introducción, casi todos los bancos de semillas se pasaron a las semillas feminizadas. Hoy en día, la mayoría de las semillas que se venden son feminizadas. Eso es fabuloso para los cultivadores como tú y como yo, pero también lo es para los criadores. Esto se debe a que las semillas de marihuana feminizadas son más difíciles de clonar que las normales, lo que evita que los imitadores se puedan hacer con sus variedades tan cuidadosamente desarrolladas.
Las ventajas de las semillas regulares
Bien, ya que lo prometido es deuda, ahora enumeraré las principales ventajas que las semillas regulares te ofrecen como cultivador.
Nunca más cultives hermafroditas
Siempre que tomes suficientes muestras, las semillas regulares producen un 50% de plantas macho y un 50% de plantas hembra. Las plantas femeninas son realmente 100% femeninas, sin contener ningún ADN masculino. Las semillas regulares rara vez, si es que alguna, producen plantas hermafroditas, eso es un hecho. Dado que las semillas feminizadas se fabrican utilizando al menos una planta hermafrodita como padre, tienen muchas más posibilidades de convertirse en “herma” que las semillas normales. Te darás cuenta de ello cuando estreses a tus plantas podándolas. Técnicas como el topping, el fimming, el lollypopping o la defoliación son causas de estrés para las plantas. En respuesta a ese estrés, las plantas de marihuana cultivadas a partir de semillas feminizadas pueden convertirse en hermafroditas, produciendo finalmente flores masculinas. Esa posibilidad se reduce drásticamente si cultivas hierba a partir de semillas normales: ¡eso en sí es una gran ventaja!
Tu propia creación a partir de semillas regulares
La creación de tu propia cepa también requiere semillas regulares. Eso es porque las semillas regulares nos dan las plantas macho que necesitamos para que el proceso funcione. El cruce de dos variedades individuales de cannabis permite combinar las propiedades deseadas de cada una de ellas. De este modo, puedes desarrollar tu propia cepa y mejorar la que ya tenías. Para los cultivadores ahorradores entre nosotros: si quieres, puedes cultivar tu propia planta libre para producir nuevas semillas. Eso sí, tendrás que polinizarla para que funcione: asegúrate de hacerlo en una habitación aislada, aislada de cualquiera de tus plantas cosechables.
Entonces, ¿feminizadas o regulares?
Ya lo sabes todo. Probablemente ya lo hayas entendido. Si sabes lo que distingue a las plantas feminizadas de las regulares, ampliarás tus opciones para futuros proyectos de cultivo. Ambas variedades tienen sus propios pros y contras, pero en última instancia, la elección es tuya.
Personalmente, me he convertido en un gran fan de las semillas regulares a lo largo de mis años de cultivo de hierba. Suelo utilizar semillas regulares para cultivar plantas madre fuertes y sanas. Tomo nuevos esquejes de esas plantas madre para llenar mi cuarto de cultivo con plantas 100% femeninas que dan resultados asombrosos.
Si has sentido curiosidad por las semillas regulares de la gama de Amsterdam Genetics, entonces adelante: ¡consulta nuestras sensacionales semillas Critical Mass Regular y Amnesia Haze Regular y empieza a cultivar la tuya hoy mismo!